El llamado #Catalangate ha sido un escándalo político acontecido este 2022 que involucra un supuesto caso de espionaje, perpetrado utilizando el software espía Pegasus del Grupo NSO contra figuras de los movimientos separatistas catalán y vasco.
Las principales personalidades detrás de las organizaciones supuestamente afectadas alegaron disponer de pruebas que demostraban que el software Pegasus, de la empresa NSO Group había sido usado para intervenir sus teléfonos, señalando que el gobierno español había ordenado las intervenciones. A pesar de que en ningún momento aportaron prueba alguna de los pinchazos, las principales organizaciones independentistas lanzaron una campaña de comunicación al más alto nivel acusando al gobierno español para promover sus objetivos políticos.
Orígen de la campaña
La campaña #Catalangate comenzó con la siguiente publicación en Twitter realizada el 19 de abril, que venía acompañada del sitio web con el mismo nombre en el cual se aportaba información sobre los afectados:
Sin embargo, el dominio “catalangate.cat” había sido registrado bastante antes.
Respecto a la cuenta en Twitter, esta tampoco fue creada de la nada. De hecho, se dio de alta en 2012 y como varios investigadores han indicado, fue usada en un gran número de campañas de propaganda por parte del independentismo. Por ejemplo, anteriormente había ocupado los nombres de usuario “ElJudici” cubriendo el juicio al “procés” de manera partidista o “CridaDemocratica” alentando a manifestaciones durante la época de referéndum ilegal.
De hecho la investigadora Mariluz Congosto, nos muestra en su análisis como la cuenta en cuestión es prácticamente un altavoz de Omnium cultural, una de las principales entidades independentistas, ampliamente involucrada en campañas de desestabilización social en Cataluña.
Rigor académico
Una de las piezas clave de toda la campaña de comunicación ha sido el informe emitido por el grupo de investigación Citizenlab de la universidad de Toronto. Mediante su informe, la organización avalaba mediante su supuesto “rigor académico” las acusaciones del independentismo, pero ¿Quién hay detrás de Citizenlab?
La organización está formada por autodenominados expertos en ciberseguridad, quienes, por lo que se puede apreciar en su página web, tienen más de activistas que de expertos. De hecho, el líder del grupo durante la investigación del #Catalangate fue Elies Campo, activista independentista el cual ya estuvo involucrado en el referéndum ilegal y las acciones violentas de “tsunami democráctic”
https://cronicaglobal.elespanol.com/politica/cerebro-catalangate-puigdemont-belgica_655106_102.html
Tal como él mismo muestra en Linkedin, Elies empieza a trabajar en Citizenlab semanas después de registrarse el dominio “catalangate.com”
El resto del personal del grupo sigue una línea parecida: Activistas profesionales quienes trabajan en red para multitud de plataformas de manera simultanea.
Un ejemplo es el caso de Etienne, quién mantiene una vinculación con Citizenlab a la vez que con el equipo responsable de la herramienta de “detección de pegasus” de Amnistía internacional, lo cual en cualquier organización normal implicaría un conflicto de intereses claro. Y como este, encontramos una infinidad de casos parecidos. Un repaso a los miembros del grupo en https://citizenlab.ca/people/ nos muestra que la mayor parte de ellos han estado vinculados con el activismo, que su pensamiento se mueve en la misma dirección y que, en general, el grupo no es más que una herramienta política empleada para instrumentalizar el mundo académico en favor de lobbies y grupos de interés.
A través de las siguientes publicaciones demostraremos punto por punto el uso partidista de dicha organización y su entorno para la puesta en marcha de la enésima campaña de desinformación del independentismo